El torneo lo abrió Alabama con Tornado a las 14 hs. un día (6/3/10) de sol fulgurante que hacía resplandecer las entradas de las futuras calvicie de nuestros nobles guerreros.
Mal comidos, jugando a la hora del último bocado, la jornada fue bochornosa. No sólo por el calor que batía las fuerzas de quienes nos encontramos cruzando el meridiano de nuestras vidas, sino que también fue un bochorno eso tan poco parecido a un partido de fútbol.
Un 0 a 0, grande como una casa donde no hubo más que un tiro en el poste de nuestro lado, y un gol errado, de parte de ellos, abajo del arco y con el arquero ya vencido.
Ultimo partido de nuestro Mariscal que tuvo que salir de la provincia por razones laborales, aunque quizás, la verdadera razón, tenga que ver con un delito que no siendo federal, lo exime de pagar sus culpas yéndose bien lejos.
Lo bueno fue no peder y que los muchachos nuevos no tengan que vérselas, de buenas y primeras, con un rival muy complicado.
La segunda fecha, sí se las tuvieron que ver con un rival muy complicado.
Con Belgrano la tarea parecía imposible. Y efectivamente fué imposible.
Un tiro libre tempranero de Gustavito Masa nos pone 1 a 0 arriba mientras los belgranenses se miraban entre ellos sin poder entender que pasaba.
De ahi en más fue luchar y luchar. Parecía que no se iban a notar las ausencias de quienes ya no estaban entre nosotros, pero cuando nos perdemos un gol abajo del arco (que hubiera significado un 2-0 maravilloso ...) los belgranenses empezaron a salir de la modorra, y sobre el final ponen un merecido empate.
Luego con paciencia, toque y un magnífico juego, Belgrano nos pegó un toque bárbaro.
en 10 minutos, o menos se pusieron 4 a 1.
Así y todo se destacan en defensa Facundo y Pablo, Gustavo en el medio y Huguito en la soledad más extrema intentaba y reintentaba jugar y llegar al arco rival.
Un tiro libre mal tirado y contragolpe Belgranense para poner el 5 a 1 definitivo.
Fue un partido en donde se notaron las ausencias: el Dany y Leo en la defensa quizás resultaron los menos extrañados porque los muchachos ahi trabajaron bien (sino el resultado hubiera sido por una diferencia de 15 o 16 goles), pero el Tigre en gambeta que sorprende, la potencia de Walter adelante y la talla goleadora del Guille, no van a ser fácilmente reemplazados.
A los muchachos nuevos los vamos a esperar, seguramente cuando empiecen a tomar el ritmo en el torneo, van a mejorar en perfomance. A los pataduras que venimos de antes no nos amilanan las goleadas, sabemos que los equipos goleadores no están hechos a nuestra medida. Los goleados sí.
