Entrega, momentos de buen fútbol, limpieza en el juego, algunas situaciones de gol ... todo eso brindó "Los Anónimos", el rival de turno que nos tocaba la apacible tarde del 11 de julio.
Estos muchachos, hace más de un año, nos habían propinado un 6-1 (el primer cachetazo que recibía el equipo desde que ingresó al torneo), y en el clausura 2008 fuimos por la revancha: caímos por 2 a 1.
Esta la cosa se presentaba complicada. Necesitábamos salir del fondo para escapar del descenso y veníamos bien en las últimas fechas.
Sabíamos que un empate venía bien, que era improbable ganar... porque Alabama, por tradición, no gana dos partidos seguidos, y una derrota nos colocaba mal para las dos fechas restantes, más teniendo en cuenta que la próxima quedamos libres, y la última es con un rival difícil.
A Alabama que alcanzó con una ráfaga de fútbol en los primeros minutos, encabezada por Walter en la pelea en el campo contrario, y un cabezazo preciso de Huguito, que se elevó como si lo alzaran en andas, para ponernos 1 a 0 arriba.
Y de ahi en más, a correr Anónimos con pelota, a interrumpir juego contrario en todo el campo de juego. Sin ideas arriba, y con sobresaltos abajo, pudimos mantener el resultado hasta que el de negro dijo que se terminaba el partido.
Con bastante fortuna logramos quedarnos a tal distancia de los dos últimos, que es matemáticamente imposible caer a las posiciones destinadas a los que jugarán el próximo torneo en la B.
Alabama pasó la prueba de permanecer en la A este torneo y sueña con pelear algo más el próximo.
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